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You are Hope se basa en un juego para PC llamado "ONE HOUR ONE LIFE", creado por Jason Rohrer. Sin embargo, esta aplicación no es de él, y él no está involucrado en absoluto para hacerlo. Nuestro juego y nuestro mundo en línea están separados de los suyos, y contienen cambios y contenidos adicionales exclusivos que hemos realizado nosotros mismos.
Una cosa importante que haces en este juego es nombrar a tus hijos (que también son jugadores). "Tú eres la esperanza" es lo que diría una madre cuando le da el nombre "Esperanza" a su bebé.
Si has jugado al juego de PC, reconocerás la premisa: reconstruir la civilización desde cero junto con otros jugadores a lo largo de incontables generaciones.
Podrás aparecer como el bebé de otro jugador o como una joven si no se te encuentra a una madre adecuada. En el juego, cada minuto de tiempo real se convierte en un año hasta que alcanzas la edad máxima (los sesenta). Una sola vida es muy corta, pero lo que hagas con tu tiempo será el legado de tus hijos y nietos cuando tú ya no estés. Intenta hacerle la vida un poco más fácil a los que vengan detrás de ti para que tu descendencia tenga la oportunidad de prosperar a lo largo de las generaciones venideras.
A veces, aparecerás en medio de la nada. Tendrás que preparar una hoguera para calentarte y atrapar conejos para comer y fabricar pieles. Al principio, una piedra afilada podría convertirse en tu mejor amiga. Intenta buscar el lugar adecuado para asentarte y cultivar alimentos, porque, en cualquier momento, otros jugadores podrían convertirse en tus hijos y será tu obligación cuidar de ellos hasta que sean lo suficientemente grandes como para ayudarte.
A veces, nacerás en ciudades enormes con granjeros, cocineros, herreros, pastores y cazadores. La ropa y el equipo estarán listos para ti gracias al trabajo previo de otros jugadores que, anteriormente, fueron tus abuelos o parientes lejanos. Puede que reúnas a un grupo de amigos y te embarques en la fundación de tu propio asentamiento... o quizás heredarás la granja de tu tío... o, a lo mejor, te dedicarás a cazar osos y lobos. Las posibilidades son ilimitadas, pero no te olvides de una cosa: no habrás conseguido nada si no lograste mejorar el mundo, aunque sea un poco, a lo largo de tu corta vida.
Cada vida que juegues te hará entrar en contacto con otros jugadores. Algunos tendrán más experiencia, otros menos. Algunos te enseñarán cosas y otros aprenderán de ti. Algunos hasta serán un obstáculo para la civilización que estás construyendo, por lo que tendrás que ocuparte de ellos de la forma correspondiente. Estará en tus manos y en las de otros jugadores moldear el mundo durante cada breve lapso de tiempo, antes de que las generaciones venideras se hagan con las riendas.
Cuando se haya agotado tu vida en el juego, tendrás acceso a tu árbol genealógico y podrás ver lo que hacen tus descendientes. Te invadirá el orgullo cuando veas a todos tus descendientes de cada nueva generación que han llegado a adultos después de ti, pues sabrás que tú fuiste quien puso el granito de arena para que eso pasara.